Hay disciplinas que encierran tesoros para quienes buscan en el sitio adecuado y con el punto de vista necesario. Si se estudia cálculo, se puede apreciar su belleza. Hay quienes se emocionan ante una tabla con datos. Y si sabes en profundidad sobre historia, reconocerás muchas tramas de novelas, y te encontraras historias interesantes, como la de la capital de Paraguay.
Hoy en día, su capital es Asunción
Además de ser su capital, Asunción es la ciudad más poblada de Paraguay. A diferencia de otras capitales, es un municipio autónomo, administrado como distrito federal, que no está integrado formalmente a ningún departamento. Limita con dos ríos: al noroeste con el río Paraguay, y al oeste con el río Pilcomayo.
Por unos meses, la capital fue Luque
Durante la guerra de la Triple Alianza (1864-1860), en la que Argentina, el Imperio de Brasil y Uruguay se unieron para derrotar a Paraguay, la capital fue trasladada a Luque, a 12 kilómetros de la actual capital, por unos meses, en el año 1868. No duró mucho: poco después, en ese mismo año, se trasladó la capital a Piribebuy, a 73 kilómetros de Asunción.
Es una de las ciudades habitadas más antiguas de Latinoamérica
Si bien el podio se lo lleva la ciudad de Cholula, en México, que llegó a ser contemporánea de la famosa Teotihuacan (abandonada en el siglo VI d.C.), Asunción ha existido como ciudad habitada por siglos. Fue fundada en 1537, y si bien tuvo sus altos y sus bajos, siempre ha tenido población activa.
Su acta de fundación se perdió en un incendio
Su fundador, el Capitán Juan de Zalazar de Espinoza, había llegado con la expedición de Pedro de Mendoza. Pocos años después, en 1543, un incendio destruyó tres cuartas partes de la ciudad, incluyendo su archivo. Allí se guardaba el acta de su fundación, que no sobrevivió a las llamas. Esto no detuvo a la ciudad, que se recuperó y continuó creciendo.
Fue “la madre de las ciudades”
En los caóticos tiempos de la conquista europea, desde Asunción partieron expediciones hacia otros puntos del continente. De aquí salieron y llegaron hasta Santa Cruz (Bolivia), Santa Fe y la abandonada Buenos Aires (Argentina), entre otras. Era un fuerte en ese entonces, que sirvió como base para expandir la conquista por el territorio americano.
Es la capital más barata del mundo
Quienes viajan con frecuencia y pasan por Asunción lo saben: esta es la capital más barata del mundo. Y no sólo en cosas como, por ejemplo, la comida de los restaurantes, sino el costo de vida de la población local. Esto se debe a que los salarios son bajos, y el turismo no es una parte importante de su economía. De allí que no haya precios inflados para turistas.
Tiene el aeropuerto más operativo a nivel mundial
Un aeropuerto no puede operar en casos de factores climáticos extremos, como tornados, huracanes o similares: las pérdidas, tanto humanas como de aeronaves, serían desastrosas. Asunción tiene la suerte de tener un muy buen clima para volar: de hecho, su aeropuerto, el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, está abierto 340 días al año.
Fue declarada “capital mundial de la amistad” en 2012
Las Naciones Unidas eligió Asunción entre las cinco ciudades finalistas (siendo las otras San Juan de Puerto Rico, México D.F., Lacarno de Suiza y Lyon de Francia) en 2012. Fue la primera vez que llegó a ser elegida, aunque en años anteriores había quedado como finalista. AL fin se quedó con el galardón debido a su diversidad cultural y étnica, y la armonía con la que convivía la población.
Es la capital verde de Iberoamérica
Además de exportar energía hidroeléctrica (limpia y renovable), Asunción cuenta con la mayor cantidad de espacio arbóreo por habitante, y eso se nota no sólo en las plazas sino en sus avenidas. Es muy famosa la postal de los árboles en las veredas, que cuentan con protección legal, “del arbolado urbano”, que regula la plantación, poda, tala y cuidado de los árboles.
Gran parte de su población domina el guaraní
En Paraguay, alrededor del 90% de su población habla guaraní; se trata de una de las lenguas originarias, lo cual incluye a su capital, Asunción. Tal es así que hay incluso un dialecto paraguayo en el guaraní, y esta lengua, junto al español son lenguas oficiales nacionales, y la moneda paraguaya es el guaraní.