El «cine negro» es un término cinematográfico creado por los críticos cinematográficos y que se aplica a determinadas películas de trama criminal desarrolladas en Hollywood principalmente en la década de 1940 y la primera mitad de la década de 1950.
Características
La películas de cine negro estaban marcadas por la ley seca, la gran depresión, la Segunda Guerra Mundial y los primeros años de la Guerra Fría.
Por ello capturan una atmósfera de melancolía, pesimismo, decepción, desconfianza, desilusión, cinismo, corrupción y violencia, muchas de ellas características de la sociedad estadounidense de esa época.
En consecuencia, las películas suelen caracterizarse por imágenes dominadas por fuertes contrastes, protagonistas amargados o alienados y escenas en un entorno urbano.
El cine negro suele evitar los finales felices, los desenlaces de la películas suelen ser agridulces y a menudo también acaban en un fracaso.
Tramas
La películas de cine negro giran en torno a temas claramente pesimistas y trágicos donde el asesinato, el crimen, la infidelidad, las traiciones, los celos, las maquinaciones y las fatalidades aparecen con frecuencia.
Personajes
El cine negro generalmente presenta personajes enredados en situaciones que no son de su creación y llevados a decisiones desesperadas.
Los personajes que suelen aparecer son el héroe cínico y solitario (antihéroe), la mujer fatal, los detectives privados y el asesino.
Estética visual
La películas de cine negro suelen tener lugar en una gran y sórdida ciudad, se caracterizan por el uso de sombras y contrastes, que crean un ambiente misterioso y opresivo. Los escenarios suelen ser oscuros y claustrofóbicos, y se utilizan elementos como la lluvia y la niebla para crear una atmósfera tensa y opresiva. Su principal iconografía es la vista nocturna de una calle asfaltada y mojada tras la lluvia.
Origen del término
El término cine negro o film noir (que significa «película negra» en francés) fue atribuido por primera vez a determinadas películas de Hollywood por el crítico de cine francés Nino Frank en 1946.
Obras icónicas del cine negro
«El halcón maltés» (1941): Dirigida por John Huston, «El halcón maltés» es considerada por muchos críticos como la obra maestra del cine negro. Protagonizada por Humphrey Bogart y Mary Astor, la película cuenta la historia del detective privado Sam Spade, quien se ve envuelto en una trama de engaños y asesinatos en su búsqueda por un valioso objeto conocido como el halcón maltés.
«Perdición» (1944): Dirigida por Billy Wilder, «Perdición» es una de las obras más representativas del cine negro clásico. Protagonizada por Fred MacMurray y Barbara Stanwyck, la película cuenta la historia de un vendedor de seguros que se involucra en un plan para asesinar al marido de su amante y cobrar el dinero del seguro.
«El tercer hombre» (1949)
Dirigida por Carol Reed, «El tercer hombre» es una película que se desarrolla en la Viena de la posguerra. Protagonizada por Joseph Cotten y Orson Welles, la película cuenta la historia de un escritor que viaja a Viena para encontrarse con un amigo suyo, pero descubre que ha fallecido en extrañas circunstancias.