Cuando una película tiene un final abierto, significa que la historia no se resuelve por completo y deja preguntas sin responder o interpretaciones abiertas. En lugar de proporcionar un cierre definitivo, el final abierto invita al espectador a reflexionar y a formar sus propias conclusiones sobre lo que podría suceder después.
Los finales abiertos pueden ser fascinantes y generar debates entre los espectadores, ya que cada persona puede tener una interpretación diferente. Algunas películas optan por finales abiertos para mantener la ambigüedad o para dejar espacio a secuelas o continuaciones en el futuro.
Diferencias entre final abierto y final cerrado
La diferencia entre un final abierto y un final cerrado radica en la resolución de la historia. Mientras que un final cerrado proporciona respuestas claras y concluye todas las tramas de manera satisfactoria, un final abierto deja cabos sueltos y permite múltiples interpretaciones.